Fluminense 1 - Lanús 1 - Copa Sudamericana 2025
ESPERA POR LA UNIVERSIDAD DE CHILE O ALIANZA LIMA
Maracanazo de Lanús en otra noche de violencia policial
El Granate empató un partido desfavorable ante Fluminense con un golazo de Dylan Aquino y se clasificó a la semifinal. Los hinchas la pasaron mal.
Los primeros minutos del partido mostraron paridad. Pese a la ventaja mínima que traía del encuentro de ida, el Granate no retrocedió más allá del círculo central y buscó discutirle el dominio al Flu. Sin embargo, más por mérito del rival que por deficiencia propia, duró poco esa postura del equipo argentino. La voracidad ofensiva del conjunto brasileño se lo llevó puesto. Volcó su juego por el sector izquierdo, donde el colombiano Kevin Serna desbordó una y otra vez y fue una pesadilla para Gonzalo Pérez. Por ahí, justamente, se gestó el 1-0: Serna llegó al fondo, envió un centro que encontró a Luciano Acosta y el ex Boca, con su metro 61, la bajó de cabeza para Agustín Canobbio, que definió de tijera.
Ya había tenido el gol el propio Acosta de cabeza y luego fue Everaldo quien se aproximó también de arriba, ambas jugadas con intervención previa de Serna. Además, Samuel Xavier pegó un tiro en el palo. Así las cosas, el 1-0 que llevó al descanso fue la mejor de las noticias para Lanús. Perdía, pero tan sólo por un gol.
En el entretiempo, en tanto, el fútbol quedó de lado por un rato. Hubo un violento enfrentamiento entre los hinchas argentinos y la Policía brasileña. Represión a palazos y gases lacrimógenos. También balas de goma. Desesperación en la tribuna y en los propios futbolistas, que tenían allí familiares y pidieron al árbitro que no inicie el segundo tiempo. Una historia tan lamentablemente conocida.
La segunda parte inició con 20 minutos de demora y se mantuvo la tónica de la etapa inicial. Como Chiquito Romero en Brasil 2014, Nahuel Losada se convirtió en héroe al tapar un furibundo remate a quemarropa de Matheus Martinelli. Y minutos más tarde, tras un nuevo y preciso centro de Serna, el argentino Juan Pablo Freytes cabeceó exigido por el segundo palo.
Perdonó Fluminense, que no tuvo la suerte de su lado, y el que no lo haría sería Lanús, eficaz como pocas veces. De contraataque, se jugó la personal Dylan Aquino, tiró una pared genial con Marcelino Moreno y definió ante la salida de Fabio. El gol de su vida a los 20 años. Se festejó con bronca en la tribuna. Corrieron y lucharon los dirigidos por Mauricio Pellegrino en el final. Se aferraron a un empate que fue victoria. Y espera en la semifinal por Alianza Lima o la U de Chile.