San Lorenzo 1 (3) - Gimnasia 1 (1) - Torneo de Verano 2018

EL EQUIPO DE BIAGGIO VENCIÓ A GIMNASIA EN SALTA

San Lorenzo mejoró en el juego, pero recién festejó en los penales

Belluschi le daba un triunfo justo. Un error de Torrico lo llevó a penales. Allí, el “1” atajó dos y luego se lesionó.

Héroe de mil batallas, ayer Sebastián Torrico tuvo uno de esos errores impensados para un arquero de su nivel. Y San Lorenzo, que acariciaba el triunfo en los noventa minutos, debió esperar hasta la definición por penales para cantar victoria. Sin embargo, en la lluviosa noche salteña y más allá de la falla del mendocino, los azulgranas mejoraron su nivel del verano, aunque esta vez pagaron caro su falta de efectividad.

Apenas habían pasado 14 segundos de partido que San Lorenzo ya tuvo su primera chance: el despeje de cabeza de Coronel, corto, dejó el balón en los pies de Belluschi, que de primera quiso vencer a Arias, aunque el arquero -que había salido de su área y quedado a mitad de camino- estuvo rápido de reflejos y desvió el balón. Díficil hablar de merecimientos en tan poco tiempo, pero esa situación sirvió para describir lo que sucedería luego: más por errores ajenos que por aciertos propios, los de Boedo merodearon el gol, pero a último momento se les ahogó el grito.

Fueron de mayor a menor los dirigidos por Biaggio, que tuvieron 25 minutos en un muy buen nivel. Sin embargo, a diferencia de lo que le sucedió a lo largo de varios pasajes del segundo semestre del 2017 (cuando el equipo no jugaba del todo bien pero conseguía resultados), ayer, San Lorenzo tuvo las chances más claras, pero fue ineficaz. En total fueron tres los mano a mano con los que contaron los azulgranas, dos de Cerutti y uno de Blandi. Y ojo: no hubo demasiado mérito de Arias para que no terminaran en gol, sino que en cada una de estas situaciones fueron tanto Pocho como Nico los que fallaron. Con un juego más vertical que horizontal, los de Boedo dominaron a un rival que se vio sometido en el inicio.

Es más: Gimnasia -sin quererlo, claro- hizo todo lo posible para que San Lorenzo marcara un gol. Hubo groseros errores de la defensa platense: en su intención de pararse lejos del arco propio, su última línea quedó escalonada y habilitó en más de una ocasión a los jugadores de enfrente. Fue tan malo el primer tiempo de Gimnasia que ni Alemán se salvó: el Ovejero, acaso el arma más peligrosa del Tripero, falló hasta en los tiros libres, una de sus especialidades. No obstante, los de Boedo sacaron el pie del acelerador. Gimnasia, con poco, igualó las acciones. Y hasta pudo marcar una ventaja que hubiera sido injusta, pero Dibble tardó en definir.

El Pampa movió el banco de suplentes en el complemento. Pero en un principio los ingresos de Moyano, Piris da Motta y Botta no cambiaron demasiado la ecuación, como para darle un poco la razón al DT en su pedido por un refuerzo de jerarquía. Sin embargo, la ventaja llegó para los azulgranas, ya que de tanto jugar con fuego, Gimnasia se quemó. Arias quiso salir jugando con Rinaudo, pero el volante fue atorado por Moyano. La pelota le cayó a Blandi, que asistió de taco a Belluschi para el 1-0 azulgrana.

Gimnasia no reacciónó. Pero, inesperadamente, se encontró con el empate en la última jugada del partido: Torrico le cometió un infantil penal a Alemán, que el propio Ovejero transformó en gol. Luego, en la definición por penales, San Lorenzo festejó con un inesperado Cerutti en el arco por la lesión de Torrico en el último disparo. Tanto San Lorenzo como Gimnasia deben seguir mejorando, claro. No hay mucho tiempo: la Superliga está a la vuelta de la esquina.


Definición por tiros desde el punto penal: San Lorenzo 3 (anotaron Fernando Belluschi, Matías Caruzzo y Ezequiel Cerutti; Alexis Martín Arias tapó el disparo de Rubén Botta); Gimnasia 1 (convirtió Brahian Alemán; Sebastián Torrico contuvo los remates de Franco Niell y Nicolás Colazo; Agustín Bolívar estrelló su tiro en el palo).

Independiente 2 (3) - Racing 2 (1) - Torneo de Verano 2018

RACING PERDÍA 2-0, PERO LO IGUALÓ SOBRE LA HORA; EL ROJO FUE MÁS EFICAZ EN LA SERIE DECISIVA

Independiente ganó en los penales un gran clásico que se le había escapado en el final

Fue un partidazo marcado por la ambición de los dos equipos, que contaron con delanteros cruciales. Leandro Fernández y Lautaro Martínez, imparables, marcaron dos goles cada uno.

Arrancó como para festejar muy fuerte; intuyó un baile, creyó que sería una noche de disfrute absoluto de principio a fin. Pero al poco tiempo comenzó a sufrir. Pasó de dominar a desinflarse en el mismo trayecto, se le escapó una victoria agónica pero, al cabo, mantuvo el aplomo a la hora de la definición y se llevó todas las sonrisas. Independiente venció a Racing por penales en el primer clásico de 2018 y extendió la alegría con la que cerró el 2017.

El fútbol argentino podrá no ser el mejor del mundo, pero nunca será el menos emocionante. Y esa sensación se agranda cuando se juega un clásico. No importa si es en Avellaneda o en Mar del Plata, en este planeta o en otro. Independiente y Racing dieron espectáculo y eso debe celebrarse, más allá del vencedor y las cargadas de turno. Dos técnicos audaces son capaces de poner en cancha a dos equipos ambiciosos y ayer lo demostraron.

Independiente tiene más trabajo que Racing y ahí estuvo la diferencia. En el Rojo, los movimientos salen naturalmente. El entrenador, Ariel Holan, mira el juego con las manos en los bolsillos y casi no grita. Sabe que -redundancia al margen- los jugadores saben. Saben, por ejemplo, que deben atacar por el lado de Alexis Soto; entonces por ahí se gesta el penal del primer gol de Leandro Fernández, el verdugo contemporáneo de la Academia. Entiende, Maximiliano Meza, que debe ir al espacio que deja libre Renzo Saravia y en ese lugar se inicia el segundo gol: desborde, centro y gol. Holan puso en cancha un esquema atípico: 5-1-3-1. Torito Rodríguez se bancó el medio solo; Domingo fue líbero. Independiente invitó a Racing a que lo presionara y utilizó la línea de tres delanteros-volantes para atacar con furia y en bloque. Cada avance del Rojo llevó peligro de gol.

De Racing se vieron cosas buenas y movimientos no aprendidos que demandarán tiempo, ni más ni menos. Eduardo Coudet gritó como pocas veces -lo que ya es todo un decir- en su historia de entrenador. La idea se está gestando. Al Pulpo González le costó encontrar su lugar en la cancha: no sabía si ir contra Domingo o contra Rodríguez. Y en ese pensar se le acabó el primer tiempo. Si el ex Lanús no anda, Racing sufre. Buena primera presentación de Nery Domínguez y el otro Neri -Cardozo- demostró que tiene claridad. Cuando parecía que se venía la noche, Lautaro Martínez cantó presente. Paradojas: Martínez le hizo a Holan un gol con el estilo del hóckey. ¿Cómo? Desvió un centro de Licha López similar a una jugada de córner corto.

El segundo tiempo arrancó igual de intenso que el primero. Pero Racing se plantó mejor e Independiente mostró signos de cansancio bien temprano. Lo tuvo dos veces Lautaro Martínez: en una pifió el desvío luego de otro pase de Licha y en la otra Campaña se quedó con el mano a mano. El seguro arquero uruguayo también evitó el empate de Neri Cardozo, tras un remate lejano.

Se quedó sin piernas en el medio el Rojo y los cambios que ensayó Holan no oxigenaron. El juego se volvió de un solo protagonista: la Academia. Coudet incluyó juventud, pero le faltó lucidez. Fue sin ideas el conjunto del Chacho, aunque fue. Lisandro peleó la última como si fuese la última (grave error de Figal) y Lautaro marcó el empate girando desde el suelo, desde donde sólo los cracks pueden hacerlo. Racing manoteó una vida más, pero no le alcanzó y fue todo rojo.


Definición por tiros desde el punto penal: Independiente 3 (anotaron Maximiliano Meza, Lucas Albertengo y Nicolás Domingo; Juan Musso tapó el disparo de Gastón Silva); Racing 1 (convirtió Diego González; Martín Campaña contuvo el remate de Alejandro Donatti; Enrique Triverio y Lautaro Martínez desviaron sus tiros por encima del travesaño).

Newell's 1 (4) - Banfield 1 (3) - Torneo de Verano 2018

LOS ROSARINOS SE IMPUSIERON 4-3

Newell's acertó en los penales y amargó a Banfield

Empataron 1-1 en los 90 y en la definición el último tiro le quedó a Brian Sarmiento. Y el ex del Taladro no falló.

Oportunismo y un poquito de decisión fueron los argumentos que presentó Newell's pero el festejo lo tuvo en los penales, al ganar la serie 4-3 tras el 1-1 en los 90 minutos. Banfield, deslucido e inexpresivo, tiene la cabeza puesta en el partido del 30 ante Independiente del Valle por la fase preliminar de la Copa Libertadores.

Una trepada fantástica de José San Román por el lateral derecho y el centro preciso para el cabezazo de Luis Leal, pese al intento frustrado de Jorge Rodríguez de despejar la pelota cuando había traspasado la línea. Un gol que a los tres minutos de juego marcó la tendencia para después.

Newell's (con una casaca alternativa, el nuevo modelo y su sponsor los presentará el lunes) repitió la fórmula con envíos aéreos para forzar el error de una defensa indecisa y permeable, que tuvo el debut del paraguayo Danilo Ortiz y extrañó a Renato Civelli, ausente por una tendinitis. Otro cabezazo de Juan Ignacio Sills encontró la buena respuesta de Mauricio Arboleda desde el piso junto a la base del palo izquierdo. Nuevo frentazo del juvenil Joaquín Varela, al promediar la etapa, controlado por el arquero. Y en el cierre, el sorpresivo bombazo de derecha de San Román -desde 35 metros- que se estrelló en el travesaño y una atorada de Arboleda para abortar el intento franco de Leal.

A Banfield le costó tener la pelota, casi no generó riesgo más allá del tiro libre alto de Sperduti y un cabezazo forzado de Darío Cvitanich, y se mostró repetitivo, lejos de esa búsqueda ofensiva que suele proponer. Una preocupación que evaluará Julio César Falcioni (el DT se recupera de la cirugía en la garganta y el miércoles pasó por el predio de Luis Guillón para hablar con el plantel) si su equipo no quiere pasar algún sobresalto a futuro.

La igualdad llegó a poco de comenzar el segundo tiempo, al conectar Cvitanich de palomita al palo derecho el envío de tiro libre de Jesús Dátolo. Lo tuvo Bertolo pero definió con displicencia y Sills llegó con lo justo para frenar la pelota en la línea.

En los penales, celebró Newell's.


Definición por tiros desde el punto penal: Newell's 4 (anotaron Braian Rivero, Joaquín Torres, Juan Ignacio Sills y Brian Sarmiento; Iván Arboleda tapó el disparo de José San Róman); Banfield 3 (convirtieron Jesús Dátolo, Claudio Villagra y Pablo Mouche; Nelson Ibáñez contuvo el remate de Juan Pablo Álvarez; Jorge Rodríguez desvió su tiro por encima del travesaño).

Boca 2 (2) - Aldosivi 2 (4) - Torneo de Verano 2018

VOLVIÓ TÉVEZ, HIZO UN GOL PAVÓN Y ÁBILA TAMBIÉN MARCÓ EN SU PRIMER PARTIDO

Buenas señales, aunque concedió el empate y perdió en los penales

Boca atacó mejor de lo que defendió. No pudo conservar los dos goles de ventaja y Aldosivi aprovechó.

Se presentó en Mar del Plata este nuevo Súper Boca. Y los rivales que lo enfrentarán en este 2018 tienen que saber que van a ser atacados con una intensidad y una potencia pocas veces vista. Si ya era ofensivo, este año con el nuevo esquema y la incorporación de Carlos Tévez y de Ramón Ábila, se acrecienta aún más y gana en potencia. Es que Carlitos empuja mucho, al margen de su fútbol, y Wanchope aporta gol. Aunque, también, los hinchas tienen que saber que Boca sufrirá en defensa cuando lo ataquen. De hecho, anoche, ganaba tranquilo, se confió, se lo empataron y perdió en los penales. Un llamado de atención para el equipo de Guillermo.

Boca tuvo a cuatro jugadores netos de ataque, iban los laterales, se desprendía Nahitan Nández y, a veces, también Pablo Pérez (se retiró lesionado por una molestia en el gemelo izquierdo). Pero por momentos quedaba desbalanceado, sin medio.

Por lo que se vio anoche, con este esquema 4-2-3-1 que Guillermo rediseñó a partir de la vuelta de Tévez, el que vio más alterado su manera de jugar es Pablo Pérez. Antes, el ex Newell's pensaba el fútbol de una manera vertical y ofensiva. Ayer, al tener que hacer el trabajo de Wilmar Barrios, pensó más de manera horizontal y mirando para los costados y para atrás, relojeando los relevos. Y Nandez es un jugador que tiene un despliegue fenomenal pero es desordenado y comete muchas faltas. Por momentos, Boca quedaba partido y ahí le ofrecía espacios a Aldosivi, que casi aprovecha en el primer tiempo pero Emmanuel Mas salvó sobre la línea. Y después llegó al empate por esas ventajas que dio Boca, las que se profundizaron con el ingreso del colombiano Sebastián Pérez, muy errático, y la salida de Pablo Pérez.

Boca ganaba con los goles de Cristian Pavón -como si fuera poco también cuenta con el desequilibrio del cordobés- y de Ábila. Pero el Tiburón reaccionó. Consiguió el descuento, en el complemento, con un estupendo tiro libre de Arnaldo González. Y después, con otro furibundo remate, Cristian Chávez estampó la igualdad para hacer el encuentro aún más atractivo. El ex San Lorenzo encontró esos resquicios que Boca le ofreció para sacar el disparo sin complicaciones. Boca pagó caro sus distracciones y todo terminó en los penales. Ahí, Aldosivi estuvo más certero para llevarse la copa que había en juego.


Definición por tiros desde el punto penal: Boca 2 (anotaron Julio Buffarini y Emmanuel Mas; Sebastián Moyano tapó el disparo de Cristian Pavón; Walter Bou desvió su tiro por encima del travesaño); Aldosivi 4 (convirtieron Arnaldo González, Fernando Telechea, Nahuel Yeri y Esteban Orfano; Agustín Rossi contuvo el remate de Antonio Medina).

Talleres 1 - Belgrano 1 - Torneo de Verano 2018

CON DOS GOLES EN UN FINAL ELECTRIZANTE, LA COPA AMISTAD QUEDÓ SIN DUEÑO

Una multitud en el empate de Talleres y Belgrano

Después de dos años y medio, se jugó en el Kempes con ambas hinchadas. Marcaron Menéndez y Godoy.

Las emociones llegaron al final. En diez minutos, el partido tuvo toda la electricidad que faltó en los otros 80. En el Mario Alberto Kempes, Talleres y Belgrano terminaron a mano. No hubo definición por penales. Así, la Copa Amistad quedó vacante. Quizás, se defina en otro amistoso en el invierno.

Parecía un milagro que alguno de los dos convirtiera un gol. Hasta que Reynoso entró al área de Belgrano por la izquierda y Sequeira lo derribó. Delfino no dudó y pitó penal. Lucas Acosta se lo atajó a Olaza pero Menéndez estuvo más atento que todos y mandó la pelota a la red para el delirio de los hinchas de Talleres.

Parecía cosa juzgada. Es que faltaban cinco minutos y Belgrano jugaba con uno menos desde los 26 minutos del complemento por la expulsión de Cristian Lema. Y estaba replegado tratando de sostener el empate. Pero el gol de Talleres lo hizo reaccionar. Y tuvo una pelota parada a los tres minutos. Centro y gol de cabeza de Godoy. La explosión pasó a la otra tribuna y los piratas se fueron del Kempes más felices, gozando a su rival.

De todos modos, casi se quedan con las manos vacías. Porque Talleres tuvo el triunfo en los pies de Menéndez cuando ya se jugaba el adicional pero su remate salió desviado.

Antes de esa electrizante secuencia, el encuentro se pareció más a un entrenamiento, pero con camisetas, Poco más de 40 mil hinchas entre las dos parcialidades (no había público de ambos clubes en un clásico cordobés desde el amistoso invernal de 2016 cuando también igualaron 1 a 1, pero ahí sí hubo definición por penales y ganó Belgrano). Y lo mejor hasta los 80 minutos estuvo en las tribunas. Afortunadamente, hubo paz.

Al margen de la parsimonia de los dos equipos, Talleres había insinuado un poco más. con los desbordes de Joao Rojas, quien tuvo una chance con un remate. De los pies del ecuatoriano salió lo mejor de la T. Y fue difícil de parar para la defensa Celeste. Belgrano, era fervor y nada de fútbol. Después, hubo temores escénicos y miedo a perder. El clásico venía defraudando hasta antes de esos minutos finales que le dieron un giro brusco. Terminaron igualados pero al menos brindaron algo de emoción.

Huracán 2 - San Lorenzo 0 - Torneo de Verano 2018

FUE 2-0 EN MAR DEL PLATA, CON GOLES EN EL ARRANQUE DEL SEGUNDO TIEMPO

La versión titular de Huracán no perdonó a la propuesta bis de San Lorenzo

Las grandes virtudes de la formación de Alfaro fueron la seriedad y el oportunismo. El equipo de Biaggio tuvo buenos ratos de Botta y de Castro, pero le faltó consistencia defensiva.

El serio y molesto Huracán de Gustavo Alfaro dejó sin invicto al efectivo San Lorenzo de Claudio Biaggio: se impuso 2-0 en el clásico de Mar del Plata. Tuvieron que pasar seis partidos para que el Pampa culmine un juego con derrota, desde aquella caída a principios de noviembre ante Banfield, en el que había sido, hasta ayer, su único encuentro perdido como DT azulgrana. Ayer, los suplentes del Ciclón redondearon un aceptable primer tiempo, pero no supieron reaccionar a los goles del Globo y a la movilidad de Patricio Toranzo, de muy alto rendimiento.

Jugaron sin temores San Lorenzo y Huracán y por eso salió un partido atractivo, especialmente en el primer tiempo. Un ataque por otro, pocos cortes en el medio, muchas corridas. En el Ciclón, Rubén Botta sigue demostrando que tiene un gran verano. Parece que el Pampa le encontró el lugar en la cancha: libre, cerca de delantero centro y sin la responsabilidad de conducir. O sea: Botta como complemento de Pipi Romagnoli y no jugando de Romagnoli, mucho menos por las bandas y sin funciones defensivas. Desde su zurda nacieron las mejores jugadas del elenco de Boedo.

Generó un lindo tiro libre luego de una pared con Moyano (otra de las interesantes apariciones) y habilitó -después de recuperar en la mitad de la cancha- a Alexis Castro para dejarlo mano a mano con el arquero. Sucedió que el volante hizo un control largo y luego Lucas Villalba lo desestabilizó, por lo que Castro terminó chocando con Díaz, que se llevó la peor parte -sufrió un corte en la cabeza-. El golpe entre ambos fue tan fuerte que el partido estuvo detenido por alrededor de diez minutos y, más tarde, el arquero fue reemplazado tras un intento de continuar que no prosperó. Eso sí: en aquella acción, Patricio Loustau debió haber sancionado penal para San Lorenzo por la infracción de Villalba.

Huracán también atacó con mucha gente y se brindó al espectáculo. Ya no salen de memoria los 4-4-2 rígidos de Gustavo Alfaro. Aggiornó su esquema al 4-2-3-1. Ayer, en la cálida noche de Mar del Plata, debutó Tito Noir en el lugar de Romero Gamarra. El ex delantero de Racing no tiene la conducción de Kaku, pero pisa el área con mucha determinación. Tiene movimientos interesantes Noir para llegar a posición de gol. Tendrán que acostumbrarse sus nuevos compañeros a él.

Se dijo: la primera parte fue de ida y vuelta. Los mediocampos sufrieron. Botta le ganó las espaldas a Calello y Bogado; Pato Toranzo a Robert Piris da Motta. En los últimos minutos de la primera parte, el ingresado Manuel García le tapó un disparo cruzado a Castro y, por el lado del Globo, Ignacio Pussetto se encontró con un regalo del juvenil Pereyra y remató por encima del travesaño desde el área menor.

La etapa final arrancó con un gol ni bien comenzó, y a partir de ahí el partido cambió. Martín Nervo le ganó la marca a Coloccini y su cabezazo viajó al gol previo desvío en da Motta. Iban 2 minutos. Al equipo de suplentes de San Lorenzo le dolió el golpe y no pudo reaccionar. Huracán se agrandó y siguió manejando la pelota. Y a los 11, Senesi le cometió un infantil penal a Pussetto que Bogado cambió por gol. Las dudas de San Lorenzo se profundizaron. Biaggio metió mano en el banco pero fue en vano. Botta siguió estando participativo, aunque muy solo desde la salida de Romagnoli. Encima, en las pocas que inquietó, respondió García.

Tanto para uno como el otro, la prioridad estará en la Superliga. Para Huracán, esta victoria significa un gran envión anímico en el medio de la pretemporada. Para San Lorenzo, una mínima señal de alerta: los jugadores de recambio también deberán ajustar sus tuercas.

Racing 0 - Temperley 1 - Torneo de Verano 2018

RACING PERDIÓ 1 A 0 EN UNA FRÍA NOCHE MARPLATENSE

Temperley le amargó el debut a Coudet en la previa del clásico

El entrenador se apoyó en los jóvenes y debe trabajar la idea de juego. El viernes, con titulares, ante Independiente.

Este Racing de Eduardo Coudet, que anoche hizo su presentación como entrenador en la derrota por 1-0 ante Temperley, se tendrá que apoyar mucho en los jóvenes, porque tiene un plantel corto y un calendario apretado. No fue un buen ensayo para la mayoría de los chicos que puso el Chacho, salvo el de Gastón Córdoba. El nacido en Villa Corina hace 17 años ingresó en la segunda parte y con un par de jugadas evidenció por qué lo señalan como la gran esperanza. Por lo demás, Coudet se llevó una certeza: tiene que seguir trabajando la idea de juego. Sobre todo porque a los titulares, que estuvieron en la platea, se les viene el clásico del viernes ante Independiente.

No se notó mucho la mano de Coudet, especialmente en la etapa inicial. Es injusto reclamar que se vea en su totalidad la idea que proclama el DT en el primer partido del ciclo, pero tampoco se percibieron las pequeñas cosas. Y en eso no hay culpas ni en el Chacho ni en los jugadores. El tiempo de trabajo, se sabe, es acotado. Este Racing muletto se pareció demasiado al de Diego Cocca: poco agresivo y poco lúcido para manejar la pelota. Cuestión de herencia.

La expectativa en los hinchas de Racing era semejante a la del entrenador. Estaba con tantas ganas el Chacho, que fue el único que se animó a usar remera de mangas cortas a pesar del frío. Probó con los suplentes el técnico: los quiere observar porque los va a necesitar.

El puesto de volante central es clave (llegó Nery Domínguez) y ayer fue ocupado por el interesante juvenil Kevin Gutiérrez. Le dicen Facha, corre con el tranco de Fernando Gago y tiene un gran primer pase, pero le falta presencia física. Cuando va hacia los costados, pierde más de lo que gana y Temperley entendió rápido que a sus espaldas podía encontrar alegrías. El gol de Juan Ignacio Sánchez Sotelo se inició con Brandán, que aprovechó ese espacio y después Alexis Soto peleó con tibieza la pelota.

Coudet optó por el esquema que más lo seduce: el 4-1-3-2. Pagó Gutiérrez también esa disposición táctica, porque César Meli se vinculó más con los atacantes que con los defensores y el juvenil mediocampista quedó demasiado solo. Un equipo más corto lo hubiese ayudado más. Son cuestiones simples de solucionar; nada para alarmarse.

A los costados de Meli, que participó bastante y no erró tantos pases, se ubicaron Martín Ojeda y Augusto Solari. El zurdo ex Ferro se destacó con algunas corridas y remates desde afuera. A Triverio la pelota le llegó poco y la movilidad de Cuadra tal vez haya sido el punto más destacado.

¿Y la defensa? Floja reacción de Javier García en el único gol del partido. El debutante Héctor Villalba cumplió y Miguel Ángel Barbieri evidenció que se siente un tanto incómodo de segundo central.

Temperley sigue una línea de trabajo y por eso no sorprende el criterio con el que juega. Lo hace bien, intenta atacar con mucha gente y busca ser protagonista. Las 5 mil personas que colmaron la popular disfrutaron del primer amistoso de estas características en la historia del club a pura algarabía. Y se llevaron el premio de la victoria merecida, que pudo haber sido más abultada de no ser porque el Celeste desperdició un par de contraataques peligrosos en el segundo tiempo. Con Gastón Esmerado en el banco, Temperley sigue sin perder y aferrará a eso sus ilusiones de permanencia.

Boca 2 - Godoy Cruz 3 - Torneo de Verano 2018

DERROTA XENEIZE EN EL PRIMER AMISTOSO DEL AÑO

El Boca suplente fue menos que Godoy Cruz y varios estuvieron lejos de su nivel

Los mendocinos se mostraron superiores en el PT y se pusieron 2-0. Después, los de Guillermo tuvieron chances para igualar. El local hizo el 3-1 en su peor momento.

Se sabe: Boca va por todo en este 2018, y está armando un equipo acorde a las exigencias, con la Copa Libertadores como máximo deseo. Sin embargo, en su primera prueba de este año, al equipo de Guillermo Barros Schelotto las dudas les ganaron a las certezas. Es que si bien el Mellizo utilizó anoche un 11 alternativo ante Godoy Cruz, la mayoría de esos que el día de mañana servirán como recambio de los titulares estuvieron lejos del rendimiento esperado.

En Mendoza debutó el esquema que Barros Schelotto pensó para este año, pero los intérpretes que le darán forma al 4-2-3-1 cuando se juegue por los puntos quedaron en Buenos Aires. Y la prueba fracasó en el primer tiempo, cuando Boca sufrió demasiado ante el intenso Godoy Cruz, que lo superó durante la primera mitad en todos los sectores de la cancha. Fue un espejismo esa asistencia de Gonzalo Maroni para que Cristian Espinoza reventara el palo cuando el partido recién arrancaba. Luego, el equipo mendocino se adueñó del desarrollo y fue mejor porque, pese a ser el debut de Diego Dabove como técnico, pareció saber a que jugaba.

Boca fue un equipo muy largo y lo sufrieron los debutantes Buffarini y Más, los laterales que no tuvieron ayuda y quedaron expuestos ante la velocidad de los extremos de Godoy Cruz. Para ellos también fue un examen difícil ante la chance de quedarse con el puesto en la dura competencia interna que tendrán con los hoy titulares Jara y Fabra.

Cuando Godoy Cruz comenzaba a triangular y a mover de un lado a otro la pelota, recuperarla en el mediocampo fue una tarea complicada para Boca. En esa zona, donde Sebastián Pérez y Nández se vieron superados por la movilidad y precisión de los jugadores del Tomba, se empezaba a gestar el dominio del local, que luego se extendía a lo largo de los metros. Fueron 45 minutos complicados para jugadores a los que seguramente les costará sumar minutos en partidos oficiales. ¿Cuántas nuevas chances tendrá Vergini? Serán pocas si repite acciones como en el primer gol de Godoy Cruz, cuando fue sorprendido por un pelotazo largo y ensayó una defensa muy tibia ante la jerarquía de Santiago García. ¿Podrá Walter Bou competir con Ábila o Tévez si desaprovecha situaciones tan nítidas? La respuesta está cantada.

Las incógnitas siguen. ¿Será el colombiano Pérez una alternativa para su compatriota Barrios o para Pablo, el otro Pérez del plantel? En Mendoza se notó su falta de ritmo y, al margen de su buen pase, quedó lejos de la jugada varias veces. ¿Espinoza logrará achicar la brecha que existe con Pavón? Más allá de algunas buenas acciones en el complemento, cada vez hay más distancia entre los extremos. Lo mismo se puede decir de Junior Benítez, que pasó desapercibido, en comparación con Cardona. ¿Sara hará dudar al Mellizo? Su falta de reacción en el tercer gol de Godoy Cruz, cuando se quedó clavado en la línea del arco y permitió que le definieran en el área chica, puede dejar tranquilo a Rossi.

El que más aprovechó la posibilidad fue Maroni. El juvenil, parado en el lugar que será de Tévez, fue claro con la pelota, inteligente para buscar los espacios y lastimó cerca del área rival. Marcó el primer gol, fue clave en el segundo y dejó una gran impresión pensando en el futuro.

En el segundo tiempo Boca mostró otra cara. Nández se soltó, Buffarini clausuró su sector y la pelota fue propiedad exclusiva del visitante. Del otro lado Godoy Cruz bajó mucho la tensión y, sin el balón, dejó expuestos sus problemas para defender. El puntero de la Superliga manejó mejor el balón y dispuso de situaciones para revertir el resultado. Le volvieron a convertir en su momento más favorable. No le alcanzó y el Mellizo se habrá ido con algunas dudas.