Talleres (C) 1 - Newell's 0 - 8vos de final - Copa Argentina 2012/2013
Talleres jugó el partido como un hito en su recorrido exitoso: intenso, bravo , sin dudas. Newell’s -por momentos- pareció ajeno a la circunstancia de encuentro decisivo. Como si el título, e se que todos festejaron en la concentración del hotel justo antes de esta cita, le hubiera restado hambre de gloria. Un ejemplo emblemático: Ignacio Scocco, máximo goleador del torneo y -quizá- mejor futbolista del ámbito local, lejos estuvo de ser ese crack capaz de los mejores goles y destinatario de tantos aplausos.
Se analizaron en el tramo inicial del partido. Newell’s miró hasta dónde podía hacer fuerza Talleres. El equipo de Córdoba, agazapado, no entregó resquicios. Y demostró que tenía capacidades para lastimar. Como se suele decir en los bares en los que de fútbol se habla: “ Un equipo laburado ”.
Curiosidad complementaria: lo dirige un ex Newell’s, Arnaldo Sialle. El gol, a los 30 minutos, dio cuenta de esa observación: tiro libre en el costado derecho del área, jugada preparada de distracción, centro impecable de Gabriel Carabajal, aparición por sorpresa de Gastón Bottino, cabezazo y grito para Talleres. Esa jugada fue clave: desde entonces el equipo cordobés se convenció de que no era invulnerable el campeón. Y Newell’s, que no se guardó casi nada respecto de su formación de gala, entendió que el Argentino A no es una competición tan periférica como para vencer a sus participantes con comodidad.
Le costó a Newell’s. Llegó con dificultades hasta el área de Talleres. Y allí, cerca de la seguridad de Diego Aguiar, se nubló, se deshizo. Por el contrario, el equipo de Sialle estuvo al borde de consolidar su victoria en dos contraataques a fondo. No pudo liquidarlo. De todos modos, con aquel gol del primer tiempo, le alcanzó para vencer a Newell’s y para transformar la Copa en un entusiasmo grande.