Ganador Fecha 13 Gran DT Clausura 2011
La fractura se tradujo en un impedimento a la hora de trabajar. Es por eso que, en la fábrica textil en la que se desempeña, recibió licencia médica luego de ser operado. "Lo que pasó fue una dificultad porque tengo un nene de tres años y los gastos crecieron" contó con serenidad. Sin embargo, esa postura sombría fue seguida de una afirmación cargada de optimismo: "Dicen que después de la tormenta siempre sale el sol".
Sebastián tiene un hermano y una hermana. Ellos, junto con sus padres, conforman una familia íntegramente sanlorencista. Más allá de eso, su fanatismo xeneize, algo que comparte con su mujer y su hijo, proviene de un lugar más lejano en su árbol genealógico: su abuela paterna.
En relación con el armado del equipo, el ganador sostuvo que es de "bancar a los jugadores de un torneo a otro". Y si bien afirmó que en su plantilla cuenta con varios hombres de rendimiento regular, el indiscutido "es Riquelme".
"Todos me dicen que es un pechofrío, que es lento, pero yo no les doy bolilla" comentó. Además, agregó que para su equipo quiere indefectiblemente "un enganche que organice todo. La velocidad para correr no interesa: hay que ser rápido con la mente". Defensor a ultranza de los pensadores del juego, resaltó que mediante la pausa "se marca la diferencia. Así lo hizo Maradona, y también Román".
La intención de pagar algunos créditos es lo primero dejó ver en referencia al modo de aprovechar el premio, aunque también pasó por su cabeza la idea de "regalarle algo a mi hijo". No obstante, reconoció que "no me quiero volver loco porque la plata se va rápido. Así que supongo que una gran parte la voy a terminar guardando para cuando sea necesaria". Una reflexión construida con cautela y realismo.