River 4 - Defensores de Pronunciamiento 0 - Copa Argentina 2020
EL EQUIPO DE GALLARDO DIO EL PRIMER PASO
River no tuvo que esforzarse frente a un rival que vivió un día inolvidable
El ganador evidenció las diferencias lógicas contra un equipo del Federal A. Goles de Suárez, Álvarez, Angileri y Girotti. Delfino le anuló un gol a Defensores de Pronunciamiento.
Pasarán los años y el nombre de Duilio Montello será famoso en Pronunciamiento, el pueblo entrerriano del departamento Uruguay. Maldecirán los algo más de 2 mil habitantes del lugar cada vez que se acuerden de esa línea que le quitó la ilusión de un golpazo con sabor a injusticia. Porque Montello, segundo asistente en el duelo contra River, levantó la bandera cuando todos los jugadores de Defensores de Pronunciamiento festejaban el empate parcial. Conectó de gran manera el central Milton Álvez para vencer al coloso Franco Armani. El ferretero -ese es su oficio- Héctor Echagüe envió un centro exacto para que su compañero se elevara. Tardó en salir Javier Pinola, quedó enganchado y Álvez lo aprovechó. David le empataba a Goliat. La sorpresa viajaba al lado de la emoción. El equipo del millón de pesos de presupuesto mensual le igualaba al de los 110 millones cada 30 días. Pero no. Montello levantó la bandera al cielo y Germán Delfino sancionó el fuera de juego. Y el sueño se evaporó en un error arbitral.Por lo demás, River venció sin atenuantes a Defensores por la primera ronda de la fase final de la Copa Argentina. Aun cuando Delfino hubiese convalidado el empate parcial, los dirigidos por Marcelo Gallardo se habrían impuesto. Y es que las diferencias físicas, tácticas y técnicas son abismales entre un conjunto que juega en Primera y es considerado uno de los mejores de América y el equipo que milita en el Torneo Federal A. El resultado final fue 4 a 0 pero River pudo haber marcado un par de goles más.
Un dato asombra: ayer, en Banfield, Gallardo arrancó su octava temporada al frente del equipo de Núñez. La historia arrancó a mediados de 2014 en un duelo contra Ferro por la Copa Argentina y el Muñeco y sus dirigidos escriben capítulos en un libro que desborda de gloria.
No anduvo bien River y es lógico: fue el primer partido tras la pretemporada. Pero son tan grandes las diferencias entre uno y otro que Gallardo optó por tomar el juego ante Defensores como el de la prueba previa al comienzo del torneo local, el domingo en La Plata contra Estudiantes. No jugó como si fuese un amistoso River, pero sí como si fuese un juego de preparación: plantó cuatro delanteros en la cancha Gallardo.
Línea de tres centrales y dos laterales adelantados fue lo que eligió el entrenador para el arranque. Pero probó con Álvarez y Rollheiser como interiores (no estuvieron disponibles De La Cruz y Nacho Fernández) y evidenciaron que son más delanteros que volantes. No son claros los juveniles para manejar la pelota y se sienten más cómodos en la gambeta y en recepciones cercanas al área. Fue un ensayo, ni más ni menos. Participaron ambos bastante, aunque sin demasiadas ideas en la conducción. Eso sí: Álvarez marcó el segundo y volvió a demostrar que tiene facilidades para el gol, un dato para nada menor.
Tan sólo 15 minutos duró la ilusión de Defensores de Pronunciamiento; apenas ese tiempo pudo aguantar la defensa: tras una buena jugada colectiva entre Julián Álvarez y Matías Suárez, el cordobés definió ante la salida de David Correa. Luego del gol todo se resumió a esperar el segundo de River. Aunque, claro, en el medio sucedió el presunto offside de Álvez. Y para colmo, en la acción siguiente Álvarez señaló el 2-0 parcial.
En la segunda parte Fabricio Angileri avisó que sigue en un buen nivel y que le peleará mano a mano el lugar a Milton Casco. Hoy es el titular en el lateral de la defensa. El mendocino metió un golazo al agarrar de aire un cambio de frente de Beltrán: la pelota ingresó en el primer palo de Correa. Y unos minutos después Federico Girotti, que ingresó por Santos Borré, volvió a festejar (definió con mucha calidad en un mano a mano) y también a anunciar que pedirá más minutos para el semestre.
Germán Delfino cometió un nuevo blooper en los instantes finales del partido: cobró un penal inexistente de Armani a Álvez, pero unos segundos después dio marcha atrás su decisión por el aviso del asistente Mariano Rossetti.
Como se presumía, River se impuso sin transpirar: goleó a Defensores de Pronunciamiento y avanzó en la Copa Argentina. Fue una alegría en definitiva para Marcelo Gallardo, que comenzó con una sonrisa su octavo ciclo al mando del club de sus amores.