Estudiantes 4 - Indep'te del Valle (Ecuador) 0 - Copa Libertadores 2015
EL JUEGO AÉREO DE DESÁBATO Y DE CARRILLO MARCÓ LA DIFERENCIA ANTE UN BUEN ADVERSARIO
Estudiantes le sacó jugo a la pelota quieta y goleó
El equipo de Pellegrino había perdido 1-0 en la ida, pero supo cómo jugar la revancha para dar vuelta la serie.Estudiantes sacó a flote su mística copera y se recuperó del pálido traspié (0-1) de la semana anterior en Ecuador con su arma más letal: la pelota quieta. Anoche, aquí en La Plata, venció con sobrados merecimientos a Independiente del Valle por 4-0, triunfo que le dio la visa para entrar a la siguiente fase de la Copa Libertadores, en el Grupo 7.
A estadio hirviente, como sucede cada vez que el Pincha se viste de gala para jugar el juego que más le gusta, dejó fuera de competencia a un modesto rival de corta historia. Los ecuatorianos desarrollaron un guión muy cerrado desde lo táctico, pero simple para descifrar, ni bien se clavaron en el césped: se apretujaron en los 50 metros que iban desde la posición de su arquero Librado Azcona hasta su jugador más lejano, Carlos Quintero. En ese encastre tipo mil ladrillos dejaron fisuras por las que se filtró súbitamente Estudiantes para marcar antes del cuarto de hora.
Fue gracias a una jugada armada tras la salida de un lateral, por la izquierda. Alvaro Pereira le sirvió el balón a la cabeza de Guido Carrillo y éste lo bajó para adentro del área por donde se coló el Chavo Desábato, quien lo empujó al fondo de la red al tirarse de zurda.
Estudiantes fogoneó su partitura con intensión asfixiante desde la presión del entorno -había casi 25.000 espectadores-, mientras que los once que estaban adentro del campo de juego pujaban con el ímpetu de los volantes centrales, Damonte y Gil, que buscaron siempre de primera a Ezequiel Cerutti, una pesadilla para la zaga visitante.
Y cocinó el partido antes de la media hora con otra jugada preparada, esta vez de tiro libre, donde Cerutti le dejó el centro justo en la cabeza de Guido Carrillo. Otra vez Cerutti, otra vez de pelota parada y otra vez Desábato -ahora de cabeza al primer palo- le dieron al conjunto argentino el tercer grito de la noche copera, ese que al inicio de la segunda etapa ya lo dejó con la tranquilidad de tener la clasificación más que asegurada. El último fue de Mina en contra.
La maneja como pocos, Estudiantes. Y anoche volvió a sacarle jugo a ella, su arma más seductora y letal: la pelota parada, sin dudas su mejor recurso.